Cuando tenemos 16 años, la mayoría de nosotros pensamos que nos vamos a comer el mundo, creemos que el mundo está hecho a nuestra medida y para sucumbir a nuestras necesidades. Tomamos nuestras propias decisiones, elegimos a nuestros amigos, nos echamos nuestro primer novio, experimentamos.
Luego hay gente que con 16 años se pasa de lista y sí hace todo eso pero a la vez se va a vivir con su novio. Gran error de la vida.
Está muy bien que con 16 años queramos compartir nuestro mundo con la persona que en ese momento creemos que es más importante, pero ¿Por qué a los 16 somos tan ambiciosos?
Porque nos creemos mejor que nadie, creemos que el mundo es nuestro y no es de nadie, nos creemos Superman y no somo más que el valiente Robin esperando a que le llegue la hora de su debut.
Siempre hay una edad para todo, por eso se inventó lo que mi madre llama madurez. Una persona a los 16 años, puede haber vivido todas las experiencias habidas y por haber posibles en un adolescente, que seguirá siendo un inmaduro. Las personas maduramos según va pasando el tiempo y según los errores que cometamos, por eso nos vamos de casa cuando tenemos nuestra carrera y somos económicamente sostenibles, cuando podemos valernos por nosotros mismos tanto física, psicológica y repito económicamente.
Por eso a todos los adolescentes que penséis que la vida es una mierda, que os queréis largar de casa pensad ¿dónde vais a ir sino tenéis ni para pipas?
No hay comentarios:
Publicar un comentario